
Habaneras desde la playa
Cultura
La cultura de la cancelación llega a las habaneras: Calella veta una canción icónica por denuncias no probadas
Este año la cita no acabará con el tradicional 'El meu avi', por las acusaciones que lanza un documental de la televisión pública catalana a su autor, Josep Lluís Ortega Monasterio
La tradicional Cantada de Habaneras de Calella de Palafrugell (Gerona) no acabará con ‘El meu avi’ por primera vez desde hace 48 años. La alcaldesa, Laura Millán, del PSC, asegura que hacía falta «renovar», sobre todo después del documental ‘Murs de silenci’, de la televisión pública catalana, que vincula al compositor de esta canción, Josep Lluís Ortega Monasterio, con la explotación sexual de menores. La alcaldesa asegura que no descarta recuperar esta canción en un futuro, ni se impide a los grupos interpretar canciones del compositor.
Una decisión que ha indignado a la familia del artista, que la consideran una «injusticia» y recuerdan que hay un procedimiento judicial en curso contra los responsables del documental, Anna Teixidor y la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales, «por sus manipulaciones y falsedades».
En un comunicado, dejan claro que la demanda ya se ha admitido a trámite y el siguiente paso será la celebración de la Audiencia Previa. «Nos preocupa enormemente que una institución pública como un ayuntamiento vulnere derechos fundamentales como la libertad y la presunción de inocencia, sin esperar la resolución judicial», lamentan. Peor no solo eso. También recuerda que se ha obviado de forma sistemática sentencias firmas, de 1984 y 1985, que declararon inocente a Ortega Monasterio de estas acusaciones.
Absuelto
En el texto, los familiares no pueden creer como en pleno 2025 un ayuntamiento decide «censurar» una canción. Por este motivo, consideran que se trata de una «injusticia», pero también dejan claro que «tenemos la responsabilidad de luchar hasta el final para restituir el honor de mi abuelo». Y él, el propio compositor, ya se defendió en vida, precisan, de estas mismas acusaciones y «demostró que era una venganza de militares reaccionarios contra un coronal que había salido de la cárcel gracias a la amnistía de 1976».
La familia defiende que el único «delito» de Ortega Monasterio fue ser un militar «revolucionario», que fue a prisión inicialmente por sus vinculaciones con la UMD y por su «carácter democrático y progresista». Y, una vez amnistiado, se orquestó, prosiguen una «emboscada» contra él, que culminó con su expulsión a través de un Tribunal de Honor. Y entonces, se le acusaba de los mismos hechos que en el documental de la televisión pública catalana.
Pero eso sí, recuerdan que después de años de lucha fue declarado inocente y consiguió que fuera el primer Tribunal de Honor revocado en España. Una lucha que llegó hasta el Tribunal Supremo y que, una vez acabado todo este proceso, «fue homenajeado por altos cargos socialistas, republicanos y catalanistas».
Y más allá de estas cuestiones políticas, aseguran que la canción ‘El meu avi’ se convirtió en un himno catalán. De hecho, insisten en que Ortega Monasterio fue una persona «profundamente comprometida» con la cultura catalana y uno de los impulsores de la Cantada de Habaneras de Calella de Palafrugell desde sus inicios. E incluso puso dinero de su propio bolsillo para que este certamen se consolidara.