Los bocadillos virales de Galicia
Los bocadillos XXL de Galicia que conquistan las redes sociales: más de medio metro por sólo 7 euros
El éxito radica también en que es una propuesta basada en el producto de proximidad y en una cocina tradicional
Una bocatería en Poyo, a menos de media hora de Vigo, se ha convertido en la nueva sensación de las redes sociales. Y la razón no es otra que uno de los productos de su carta: unos bocadillos gigantes, que superan los 60 centímetros de largo, han desatado el apetito (y la curiosidad) de miles de usuarios de estas plataformas, hasta hacerlos virales.
El fenómeno no solo se explica por su tamaño descomunal, sino también por su precio: tan solo 7 euros por una pieza que muchos no logran terminar. Las imágenes virales de manos sosteniendo bocatas imposibles y clientes sorprendidos han convertido al local en una parada obligatoria.
Así son estos bocadillos descomunales
En la calle Aris número 35 de Poyo (Pontevedra) se encuentra la Bocatería Los Ángeles, un establecimiento humilde que se ha ganado un hueco en el mapa gastronómico gallego gracias a la especialidad de la casa: sus bocadillos XXL.
Se tratan de piezas de pan de unos 60 cm de largo, rellenos hasta los bordes con ingredientes frescos y abundantes. De zorza (picadillo gallego), lomo, tortilla o calamares, una de las estrellas de la carta, son algunos de los bocadillos a elegir. Y cada uno de ellos puede pedirse «completo», lo que implica que lleva lechuga, queso y hasta tres huevos, convirtiéndolos en un auténtico desafío culinario solo para valientes.
Pero el tamaño no es lo único que sorprende: el precio también juega un papel fundamental. Cada bocadillo cuesta tan solo 7 euros.
Más allá del bocata: menú del día
Aunque los bocadillos son los protagonistas, la oferta de Los Ángeles va mucho más allá. El menú del día, por ejemplo, ofrece primero, segundo y postre por solo 12 euros, con opciones caseras. Aunque también tienen la opción de elegir un plato único que incluyó además una bebida, café y postre por 10 euros
Además, hay hamburguesas con panes de 16 centímetros, sándwiches y raciones para picar que también siguen la filosofía de abundancia. Sin olvidarse de los desayunos, con una oferta especial para estudiantes. Y todo ellos elaborado con productos locales que garantizan la calidad.
Y es que el éxito de esta bocatería de Poyo no solo responde a la espectacularidad de sus raciones, sino también a una propuesta basada en el producto de proximidad y en una cocina tradicional lo que le ha llevado a convertirse en el punto de encuentro habitual, especialmente entre un público joven que acude atraído tanto por la cantidad como por el precio de sus platos.
Aunque la viralización en redes ha contribuido a aumentar su visibilidad, lo que ha llamado la atención de muchos es una propuesta tan singular que, al menos por ahora, ha logrado destacar dentro de la amplia y competitiva oferta gastronómica de las Rías Bajas.
