Vecinos del Metropolitano se quejan del ruido del concierto de Dellafuente: «Ni con una buena ventana te libras»

Este viernes, el artista urbano Dellafuente protagonizó un celebrado concierto en el Estadio Riyadh Air Metropolitano, ante 65.000 personas. Las crónicas recogen un gran espectáculo del que los asistentes disfrutaron de lo lindo, sin embargo, la cara B de la noche la pusieron los vecinos del barrio de Las Rosas, en el distrito de San Blas-Canillejas, que sufrieron el ruido del show desde sus casas.

Así lo ha denunciado uno de los afectados a través de la cuenta de X «Ruido Metropolitano», quien lamentaba que, a pesar de haber instalado en su casa una «ventana especial con triple cristal», escuchaba perfectamente el concierto. «Ni con una buena ventana te libras. Luego dice Almeida que no hay problemas de ruido», censuró, en referencia a las recientes declaraciones del alcalde de Madrid en las que aseguró que no se ha producido quejas formales por el ruido de los conciertos en el estadio del Atlético de Madrid.

No obstante, estos vecinos llevan semanas denunciando el ruido de los espectáculos, cada vez más numerosos, puesto que tras la cancelación de los conciertos en el Estadio Santiago Bernabéu -precisamente, por problemas acústicos-, muchos de esas actuaciones se han trasladado al Metropolitano.

«Aquí estamos, en un nuevo episodio de tortura patrocinado por el eventódromo Metropolitano. Y lo que queda programado... pero haremos lo posible por pararlo», afirmaba ayer uno de los vecinos a través de la mencionada cuenta de X, que les está sirviendo como canal de difusión de sus quejas.

Nueva normativa

Mientras tanto, esta semana se ha conocido que el Gobierno de la Comunidad de Madrid está trabajando en una reforma de su ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas (LEPAR) para proteger los conciertos. Una modificación en la que, previsiblemente, se elevarán los límites de decibelios permitidos para garantizar la celebración de estos espectáculos sonoros sin que las quejas de los residentes cercanos supongan un impedimento legal.

Los vecinos, tanto de Chamartín como de Canillejas, ya han advertido que se opondrán a esa legislación si consideran que atenta contra sus derechos, aunque, según ha afirmado José Luis Martínez-Almeida, la idea es que la modificación conjugue los intereses de los vecinos con la celebración de grandes eventos.

«La idea no es que haya una barra libre de ruido en Madrid, queremos mejorar el marco normativo para dar opciones para mejorar las condiciones en las que se producen los eventos y garantizar el descanso y el bienestar de los vecinos», sostuvo este viernes.