La nueva multa de dudosa legalidad con la que se está haciendo de oro la DGT

Hace ya un par de años que la DGT anunciaba la puesta en funcionamiento de un nuevo tipo de radares para mejorar la seguridad de los operarios de carretera.

En este caso fueron conocidos como radares de obra; cinemómetros que se desplegaban en zonas en las que se reducía anormalmente la velocidad de una carretera mediante señales temporales para llevar a cabo este tipo de trabajos.

Velocidad reducida

En este caso la DGT lleva ya dos años desplegando estos equipos, bien con radares fijos o bien con móviles. Lógicamente se trata de puntos en los que caen muchos conductores que sencillamente no están acostumbrados a esta velocidad anormalmente reducida, lo que equivaldría a un simple despiste, no a un exceso de velocidad premeditado.

El problema es que muchas de estas señales se quedan colocadas durante meses, incluso sin obras en activo, lo que provoca que los conductores se confíen aún más, lo que no quita para que la DGT siga desplegando radares y exigiendo su cumplimiento.

Sin obras a la vista

Es el caso que denuncian en un foro numerosos conductores que han sido sancionados con 200 y 300 euros de multa y la retirada de 2 y 3 puntos del carnet.

Los hechos señalados tienen lugar en el kilómetro 27 de la A-48 a la salida de Conil en dirección Vejer, el problema es que la carretera es de 120 km/h pero una señal indica una limitación de 80 km/h por un problema relacionado con un baden brusco o similar en la carretera que debería estar en reparación.

Tal y como establece el Reglamento General de Circulación las señales temporales tienen prioridad sobre el resto de señales excepto sobre las indicaciones de los agentes de la autoridad.

Radares a pillar

Pero también es cierto que hace algo más de un año una instrucción de la DGT recomendaba no colocar radares de velocidad en puntos en los que se reduce anormalmente el límite de velocidad, como son las travesías o en este caso concreto.

Tal y como confirma la multa que muestra un afectado, se trata de un radar móvil y no uno fijo, con lo cual con más razón para denunciar que desobedece la instrucción, todo ello sin citar que en las fotos de radar no aparece la señal amarilla de limitación temporal a 80 km/h. Razones más que suficientes para que pudiera prosperar un buen recurso.