Mandarinas
Alimentación
El error que cometes al comer mandarinas: «Es la parte más saludable»
Una experta en salud alimentaria explica por qué no hay que eliminar los hilillos blancos de la mandarina
Comer fruta forma parte de los requisitos para llevar una dieta equilibrada y variada. Las frutas son una excelente fuente de vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes para el cuerpo. Es por esto que se recomienda el consumir al menos tres piezas de fruta al día.
Entre las frutas más consumidas se encuentra la mandarina, famosa por su dulce sabor y alto contenido en vitamina C.
El error común al comer mandarinas
La experta en salud alimentaria, Cristina Lora, ha compartido una advertencia sobre la forma de comer las mandarinas.
Según comenta Cristina, «Hay dos Españas, las que se comen las hebritas y los hilitos blancos y las que los quitan porque les da un poco de asquito». La advertencia va dirigida hacia el segundo grupo. Estos hilos blancos se llaman albedos y es la parte más saludable de la mandarina. Contiene hasta 20 veces más de compuestos fenólicos que los gajos que son antioxidantes y un alto compuesto en pectina que es fibra que hace disminuir los niveles de colesterol LDL en sangre.
Beneficios de la mandarina
- Posee vitamina C que ayuda a reforzar el sistema inmunológico
- Gran aporte de fibra que mejora el tránsito intestinal
- Contienen compuestos vegetales bioactivos como los flavonoides y los carotenoides, que poseen propiedades antiinflamatorias y anticancerígenas.
- Posee bajo aporte calórico y alto contenido en agua, ideal para dietas de control de peso
Otras frutas con la misma condición
Las mandarinas no son la única fruta con la que ocurre esta situación. También pasa con sus parientes cercanas, las naranjas, que poseen un albedo similar. Las uvas entrarían del mismo modo en este grupo, cuyos hollejos contienen resveratrol, otro potente antioxidante que se pierde cuando optamos por únicamente bebernos el zumo.
Profesionales como Cristina Lora se dedican a divulgar este tipo de contenido para así acabar con la desinformación y el patrón de «pelar demasiado» frutas que no son necesarias.
