La prensa prosanchista pide en un editorial que Sánchez se someta a una cuestión de confianza

Algo se está moviendo en el PSOE. Crecen las voces dentro del partido que en las últimas 48 horas han salido a reclamar medidas más contundentes tras el escándalo de Santos Cerdán, después de que Pedro Sánchez se limitara a pedir perdón y a anunciar una auditoría de las cuentas de la formación. Incluso cada vez se oyen más voces que piden abiertamente una convocatoria electoral, como hasta ahora había hecho Emiliano García-Page a principios de este mes por el también escandaloso caso de Leire Díez con la idea de que la política nacional no perjudique al partido en las convocatorias electorales autonómicas y municipales.

El País, medio afín al Gobierno, publica este domingo un editorial cuyo titular es ya muy significativo: 'Credibilidad rota', en el que recalca que «la conmoción nacional ante la información revelada» con el informe de la UCO conocido esta semana «deja tocada la credibilidad del Gobierno de España, y especialmente la del presidente», de quien recuerda que es el responsable de nombrar a José Luis Ábalos y a Santos Cerdán para un puesto tan clave en el partido como es la Secretaría de Organización. Incluso llega a apuntar que Sánchez todavía no ha explicado el motivo por el que cesó al primero en 2021, así como que le metió en las listas cuando sobrevolaban sospechas en torno a él y que también Sánchez, que decía no saber nada hasta este jueves, confió en Cerdán hace unos meses para seguir en el cargo. Hace solo tres semanas le defendía en el Pleno del Congreso.

El medio progubernamental ve insuficiente «el acto de contrición que Sánchez escenificó» ante los medios en Ferraz. «Meses de negativas, rechazo a las sospechas y a las preguntas de la oposición (...) y su obcecada defensa de Cerdán hasta el último minuto han mermado su credibilidad», ahonda en el editorial, en el que se indica que es también un «escándalo del Gobierno», en un momento en el que los socialistas tratan de circunscribirlo a un caso del partido, porque, recuerda, «ese dinero procede de adjudicaciones públicas». Y cree que «echa por tierra la promesa de regeneración» con la que Sánchez llegó a la presidencia del Gobierno en 2018, con la moción de censura contra Mariano Rajoy.

Considera también que Moncloa carece desde que estalló todo el jueves del «respaldo indisoluble» del PSOE y de la izquierda en general; tampoco tiene un apoyo sólido de sus socios parlamentarios. «El ambiente en el PSOE es de funeral, no de resistencia», continúa. Así, en este escenario pide que Sánchez se someta a una cuestión de confianza para mostrar con ello a los ciudadanos, argumenta, «que dispone de una mayoría parlamentaria clara para gobernar».

Malestar creciente en el PSOE

En los últimos días, se han conocido declaraciones críticas con la situación en el seno del partido. El alcalde de León, José Antonio Díez, ha exigido a Sánchez que asuma responsabilidades y ha calificado de «insostenible» la situación en la formación, mostrándose partidario de forjar «un nuevo tiempo». El regidor socialista de Ames, un pueblo de La Coruña, Blas García, ha hablado de una situación política «irrespirable» y ha pedido convocar elecciones este año. Otro ejemplo es el alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, también del PSOE, que reclama un congreso extraordinario, e incluso ha señalado que si él fuera el secretario general no iría de candidato. Voz crítica también la del senador Luis Tudanca: «Primero el país, luego el partido y, por último, uno mismo», expresó este jueves. Se suman a las de Page y Javier Lambán, que piden elecciones, como también Felipe González o Alfonso Guerra.

Mientras, tal como ha contado El Debate, el presidente del Gobierno se refugió este fin de semana en una finca en Toledo con personas de su núcleo duro. Y este lunes reúne a su ejecutiva federal por primera vez después del escándalo que ha removido el partido.