El papel de la mujer cazadora, a debate en Intercaza
Cinco mujeres comparten su experiencia en el mundo cinegético

Foro sobre la mujer en el mundo de la caza en el marco de Intercaza 2025
En el marco de la 26 edición de Intercaza, la feria cinegética organizada por la Diputación de Córdoba, una de las ponencias más esperadas es la que ha tenido lugar el sábado bajo el título Foro de la mujer en la caza, que ha sido moderado por Clara Moreno de Borbón, ingeniera de Montes, cazadora y vicepresidenta del Real Club de Monteros de España, quien ha departido con otras cuatro cazadoras, como la abogada María José Pliego, la gestora cinegética Anabel Mialdea, Angelina Valvanera, vicepresidenta de la Federación de Tiro al Vuelo y tiradora de competición, así como la veterinaria y también cazadora Lorena Castillejo.
Según Clara Moreno de Borbón, la realización de este foro obedece a que otras mujeres cazadoras, preparadas, que trabajan o están involucradas en el mundo cinegético, quieren dar a conocer el papel en la caza de las mujeres, algo que se remonta a los albores de la historia. Respecto a la imagen que puedan ofrecer de cara al exterior, de Borbón afirma que «los cazadores (hombres) nos reciben muy bien, nos sentimos muy cómodas dentro de este mundo, pero es verdad que somos muchas menos aficionadas. A ver si conseguimos que, con nuestro testimonio, se animen y seamos más». «Si no se conoce, no se puede llegar a querer, y pretendemos que se vea que somos mujeres, que estamos en el sector, que nos gusta, que participamos en plena igualdad», afirma.

Clara Moreno de Borbón, moderadora del Foro de la mujer en la caza
Uno de los puntos de partida que han dejado claro el estado de la cuestión es que hay que obviar la idea preconcebida de que la mujer es nueva en esto de la caza. Se han descubierto enterramientos de mujeres jóvenes, datados hace 9.000 años y analizados por la Universidad de Seattle, que demuestran la existencia de herramientas de caza, lo que confirma el papel activo de la mujer como cazadora y no meramente como recolectora, como se creía secularmente. «Las mujeres cazadoras debemos defender nuestra identidad», según de Borbón.
Educadas en el respeto y amor a la naturaleza y la caza
Lo que ha quedado claro es que, tanto para las cuatro ponentes como la moderadora, el haber vivido la caza en el seno familiar también ha influido en su elección de este deporte, que es el tercero en este país en número de federados. «De ahí nos viene la afición, de mamarla desde pequeñas», afirma Angelina Valvanera. «Se nos ha educado en el respeto y amor a la naturaleza y a la caza», añade. La abogada María José Pliego considera que hay poco porcentaje de mujeres cazadoras por falta de tradición y porque a las jóvenes no les atrae dicha práctica «aunque yo lo he normalizado. La caza goza de poca popularidad por falta de conocimiento y se está demonizando en redes sociales. Yo misma he sido víctima de ese acoso en redes, en forma de insultos y amenazas si publicaba algo sobre mi actividad como cazadora», algo que también le sucede a la veterinaria y cazadora Lorena Castillejo cuando publica alguna intervención sobre el terreno a algún perro de rehala en monterías, prestando los primeros auxilios a dichos canes si han resultado heridos.
Lo que queda claro es que la sociedad cada vez está más envejecida en el ámbito rural y si se quiere que la afición a la caza siga viva, tiene que llevar aparejada un relevo generacional y que la mujer entre también en este mundo, sobre todo si hay algún influjo familiar, ya que, según Clara de Borbón, «somos responsables de que la percepción cambie. Si a una niña le gusta la caza, pues que la practique. La mujer es bien recibida en el mundo de la caza».