Tensión en Cádiz: un okupa se atrinchera en un piso con bombonas de butano y amenaza con volar el edificio

La Policía Nacional detuvo este pasado jueves por la noche a un okupa que se atrincheró con un cuchillo en un piso ubicado en un bajo de la calle Santa Inés, en Cádiz capital. El individuo amenazaba con hacer estallar el edificio utilizando varias bombonas de gas butano.

La actuación policial comenzó al recibir un aviso de que un individuo se había encerrado el domicilio, una vivienda presuntamente okupada, con la intención de causar una explosión con bombonas de butano. Al llegar, los agentes notaron un fuerte olor a gas, lo que motivó la activación del Protocolo de Incidentes Críticos.

De esta forma, se procedió al acordonamiento de la zona y la evacuación de los edificios colindantes, con el objetivo de garantizar la seguridad de los vecinos.

Ya en el edificio, los bomberos consiguieron abrir parcialmente la puerta y pudieron ver al individuo, que se encontraba en actitud amenazante, rodeado de bombonas de gas abiertas y empuñando un cuchillo grande, con el que se autolesionaba. Además, tenía un perro catalogado como potencialmente peligroso.

Ante esta situación de riesgo, se solicitó la intervención del Equipo Territorial de Negociación de la Policía Nacional, apoyado por agentes de la Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV).

Tras una larga negociación, la persona accedió a entregar dos cuchillos y unas tijeras con restos de sangre, permitió la evacuación del perro y dejó retirar la válvula de una bombona para evitar la explosión.

A la postre, se abrió completamente la puerta, y el individuo salió del piso por su propio pie, siendo atendido inmediatamente por los servicios sanitarios debido a las heridas autoinfligidas y trasladado al Hospital Universitario Puerta del Mar bajo custodia policial.

Durante la intervención, el individuo manifestó que en la planta superior se encontraba otra persona, algo que fue descartado tras la inspección del inmueble por parte de los bomberos y otros indicativos policiales. Las bombonas de gas fueron retiradas por los bomberos.

Tras ser valorada médicamente, la persona fue detenida como presunto autor de un delito de desórdenes públicos, mientras que el perro fue trasladado a dependencias policiales a la espera de la intervención del Servicio de Recogida de Animales del Ayuntamiento de Cádiz.

Finalmente, se localizó al legítimo propietario de la vivienda, que recuperó así su posesión. Fue el último paso de una actuación policial que evitó una posible tragedia en una céntrica zona de Cádiz.