La reflexión del Papa Francisco sobre ciencia y fe que marcó su legado: «La misma matriz en la Verdad de Dios»

Desde que tomara las riendas del Vaticano en marzo de 2013, el pontificado de Jorge Mario Bergoglio se ha caracterizado por una apertura en cuanto a la investigación científica se refiere. A lo largo de estos 12 años, el Papa Francisco ha manifestado en distintas ocasiones su postura sobre la ciencia, destacando su valor e influencia para la paz y el progreso humano, pero también enfatizando la necesidad de que la ciencia esté al servicio de la humanidad y no para su destrucción, hasta el punto de protagonizar alguna que otra polémica.

Una de las anécdotas más conocidas y controvertidas fue la defensa de Francisco sobre la teoría de la evolución y el Big Bang, afirmando que no contradicen la fe, sino que la exigen.

«La teoría de la evolución y el Big Bang son reales. Dios no es un mago con una varita mágica», aseguró en 2017 el Pontífice. «Cuando leemos sobre la creación en el Génesis, corremos el riesgo de imaginarnos a Dios como un mago, con una varita mágica que le permite hacer todo. Pero no es así», aseguró el Papa Francisco.

Ciencia y fe tienen la misma matriz en la Verdad absoluta de DiosPapa Francisco

Francisco y el papel de la ciencia

Otra de las claves del legado de Francisco radicó en una ciencia que pudiera estar al servicio de los hombres y mujeres de nuestro tiempo, y no en detrimento de ellos o incluso en su destrucción. De hecho, uno de los puntos de enfrentamiento entre el Papa y la ciencia tuvo a la inteligencia artificial como protagonista.

«Mi oración es que el rápido desarrollo de la inteligencia artificial no aumente las ya numerosas desigualdades e injusticias presentes en el mundo, sino que ayude a poner fin a las guerras y los conflictos, y a aliviar tantas formas de sufrimiento que afectan a la humanidad», expresó.

Sin embargo, la relación del Vaticano con la ciencia siempre tuvo un mayor punto de conflicto: el equilibro con la fe, un dilema histórico en la Iglesia. «La Iglesia está atenta a sus investigaciones y las alienta», dijo el Papa Francisco a los científicos que participan en una conferencia en Castel Gandolfo en 2024.

En esta cita, Francisco subrayó que la ciencia y la fe pueden «unirse en la caridad si la ciencia se pone al servicio de los hombres, sin desviarla en detrimento o incluso pérdida de ellos». Para hablar de esta unión el Pontífice destacó el camino espiritual de Georges Lemaitre, sacerdote y científico «ejemplar».

Dios no es un mago con una varita mágicaPapa Francisco

Según Francisco, Lemaitre entendió que «la ciencia y la fe siguen dos caminos diferentes y paralelos, entre los cuales no hay conflicto». «Estos caminos pueden armonizar entre sí, porque la ciencia y la fe, para un creyente, tienen la misma matriz en la Verdad absoluta de Dios», alegó en aquel encuentro el Papa.

Defensor comprometido con el medio ambiente, el Papa Francisco convirtió esta cuestión en un pilar central de su pontificado, utilizando evidencia científica para advertir sobre la crisis climática y la pérdida de biodiversidad. Su defensa a ultranza de la comunidad científica, plasmada cuando recibió en audiencia a Stephen Hawking en 2016 destaca el profundo respeto y admiración que profesaba por la ciencia, destacando su importancia para la paz, el progreso humano y la comprensión del universo.